Lasso deja el poder este 23 de noviembre 2023 en medio de criticas a su gobierno por la inseguridad
Guillermo Lasso fue candidato a la presidencia del Ecuador en las elecciones presidenciales de Ecuador de 2013, creando el movimiento CREO, movimiento conformado por exintegrantes del movimiento UNO, Izquierda Democrática, Movimiento Concertación e integrantes del sector privado nacional. Estableció la coalición Unidos por el Ecuador para las elecciones presidenciales que incluyó al movimiento CREO, PSC, Izquierda Democrática y al PLRE, obteniendo el 22.68% de los votos válidos, perdiendo contra el presidente Rafael Correa.
Luego de las elecciones, Lasso se autoproclamó como el líder de la oposición al gobierno de Rafael Correa, presentando opiniones, críticas y propuestas al gobierno frecuentemente en los medios de comunicaciones. Desde el año 2015 Lasso tomó una postura más crítica y activa contra el gobierno de Correa, además de confirmar su precandidatura a la presidencia por el movimiento CREO en las elecciones del 2017.
El 19 de febrero de 2017, participó en las elecciones presidenciales de Ecuador como candidato del movimiento Creando Oportunidades y obtuvo el 28.09% de los votos en la primera vuelta, pasando al balotaje junto a Lenín Moreno, candidato del partido oficialista Alianza PAIS.22 El 2 de abril, se llevó a cabo la segunda vuelta, que dio la victoria a Moreno con el 51.16% de los votos contra el 48.84% de Lasso.23
En agosto de 2020, anunció su candidatura a la presidencia por tercera vez en las elecciones de 2021, calificando para la segunda vuelta tras quedar en segundo lugar con 20% de votos. En la segunda vuelta, disputada con el candidato de Fuerza Compromiso Social Andrés Arauz, Lasso triunfó en la contienda electoral con el 52.36% de los votos contra el 47.64% de Arauz.24
Transición del poder
Lasso inició el proceso de transición del poder pocos días tras su triunfo electoral, designando al excandidato a alcalde de Quito, Juan Carlos Holguín, y a Iván Correa como los encargados del proceso de transmisión de mando, coordinando el trabajo entre el gobierno saliente de Lenín Moreno y el entrante, siendole encargado el proceso de transición al ministro de trabajo Andrés Isch de parte del gobierno de Moreno.252627 Lasso implementó al proceso de transmisión de mando un estilo similar al realizado en los cambios de gobierno de Estados Unidos, inaugurando una Oficina del Presidente Electo, con oficina de prensa y logo propio. Lasso ha anunciado a través de eventos virtuales sus ministros de estado por sectores, iniciando por el sector social.28
Periodo presidencial
Toma de posesión

Lasso tomó posesión como presidente el 24 de mayo de 2021 en el Palacio Legislativo, donde funciona la Asamblea Nacional,29 sucediendo a Lenín Moreno en el cargo.30
Lasso fue acompañado por su esposa María de Lourdes Alcívar y su hija menor.31
A la ceremonia el Rey de España, Felipe VI, el presidente de Haití, Jovenel Moïse, el presidente de República Dominicana, Luis Abinader, el presidente se Brasil, Jair Bolsonaro, el vicepresidente de Paraguay, Hugo Velázquez, la embajadora de los Estados Unidos ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, entre otros.32
La presidenta de la Asamblea Nacional, Guadalupe Llori, fue la encargada de tomar el juramento de Lasso como presidente y de Alfredo Borrero como vicepresidente.
Primeros decretos
La tarde del 24 de mayo Lasso firmó sus primeros decretos, donde inicialmente presentó oficialmente a los ministros de su Gabinete ministerial.34 Entre ellos consta la modificación de la Secretaría del Deporte, transformada en Ministerio del Deporte, además de la eliminación de nombres de ciudadanos de la central de riesgo con deudas de hasta US$ 1.000.35
También le otorgó funciones al vicepresidente Alfredo Borrero, el cual se encargará de la coordinación de políticas públicas para el fortalecimiento del Sistema Nacional de Salud y la representación del país frente a organismos internacionales de salud.36
Por último, derogó el reglamento general a la Ley de Comunicación y anunció que enviaría un proyecto de ley de libre expresión a la Asamblea Nacional.37
Economía
Cuando asumió el cargo, Ecuador se enfrentaba a una grave crisis económica, con un descenso del PIB del 8% en 2020, debido principalmente a la pandemia de Covid-19 y a la caída de los precios del petróleo.38
La víspera de su investidura, anunció la privatización de tres refinerías, de autopistas, de la compañía pública de telecomunicaciones y del Banco del Pacífico, así como la exención de impuestos para las inversiones en el sector turístico por un período de treinta años.39
En septiembre de 2021, anunció el lanzamiento de la Ley de Creación de Oportunidades (CREO), que lleva el nombre de su partido político, y que incluye una reforma fiscal y la flexibilización del código laboral. La ley prevé la reducción del IVA en varios productos, la supresión del impuesto de sucesiones para hijos y cónyuges, la supresión del impuesto sobre las pequeñas empresas, la flexibilización de la contratación y los horarios laborales para los nuevos empleos y la creación de zonas francas con incentivos fiscales para atraer la inversión extranjera. Sin embargo, no consiguió que la Asamblea aprobara esta reforma.40
La recuperación económica es lenta tras la caída del PIB en 2020: + 2,8% en 2021 y + 3,5% en 2022, principalmente gracias a las ventas de petróleo. Se trata de una de las actuaciones más flojas del continente americano. Al mismo tiempo, Ecuador se encuentra bajo la presión del Fondo Monetario Internacional (FMI), que exige «reformas estructurales«. Para seguir obteniendo fondos del FMI, el gobierno optó por recortar el gasto público, lo que provocó un deterioro de los servicios. A pesar de la pandemia, el sector hospitalario es objeto de un plan de despidos, mientras que los recortes presupuestarios provocan una escasez de medicamentos. La presión sobre el nivel de vida de los más pobres ha aumentado.41
En junio de 2022, su gobierno se comprometió con la Asociación de Prospectores y Desarrolladores de Canadá a reactivar varios centenares de proyectos mineros suspendidos por gobiernos anteriores.42
Vacunación contra la COVID-19[editar]

El gobierno de Lasso inició en medio de la crisis sanitaria por la Pandemia de COVID-19 en Ecuador. Una de sus promesas de campaña fue vacunar a nueve millones de personas en los primeros cien días de su gobierno.43 Designó a la doctora Ximena Garzón como ministra de salud y encargada de la vacunación contra la COVID-19.44
La vacunación se suspendió a nivel nacional el día de la posesión de Lasso como presidente, debido a un arqueo de dosis y se retomó el 26 de mayo de 2021.45
Para lograr el objetivo de imunizar a 9 millones de personas, el 27 de mayo de 2021 el Ministerio de Salud y el Consejo Nacional Electoral (CNE) llegaron a un acuerdo interinstitucional para apoyar al plan de vacunación, en el cual el CNE se comprometió a:46
- Apoyar a ejecutar el plan de vacunación en los recintos electorales de votación.47
- Poner a disposición del Ministerio de Salud, el padrón electoral utilizado en las últimas elecciones.48
- Realizar un aplicativo web para que las personas puedan cosultar su lugar de vacunación, el cual se presentó el 29 de mayo de 2021. Dicho aplicativo al inicio presentó problemas para acceder a la consulta por la saturación de consultas,49 pero luego estos problemas fueron solucionados.
Caso Pandora Papers
El 3 de octubre de 2021 se inició la publicación de notas vinculadas a los Pandora Papers (en español «Papeles de Pandora»)50 un conjunto de 11,9 millones de documentos analizados por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación. La información está relacionada con diversas cuentas offshore de personalidades, políticos y personas con gran cantidad de dinero.
Los distintos periodistas que participaron en el análisis de la información, lograron determinar que existen vínculos entre las empresas offshore y líderes políticos, empresarios, personas vinculadas a las finanzas así como también artistas. Se determinó que «35 líderes mundiales escondieron su fortuna en paraísos fiscales». Entre estos se encuentra el presidente Guillermo Lasso.5152
Manifestaciones de 2022

También conocidas como Paro Nacional en Ecuador de 2022, fueron una ola de movilizaciones a nivel nacional realizadas del 13 al 30 de junio de 2022, convocadas por varias organizaciones sociales, principalmente por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), en oposición a las políticas del gobierno de Lasso.53 Las movilizaciones se produjeron tras el primer año de gobierno de Lasso, tiempo en el cual se ha incrementado considerablemente el precio de los combustibles y la canasta básica familiar;11 además de agudizarse la crisis de seguridad que azota al país desde el gobierno de Lenín Moreno.12 Así también, se destaca el desabastecimiento y la inoperatividad del sistema de salud pública.13
Tras 18 días del Paro Nacional, las organizaciones indígenas y el gobierno lograron un acuerdo gracias a la mediación de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana; las partes en conflicto firmaron un «Acta de Paz» elaborada por la Iglesia como mediadora en el que acordaron diversos puntos. Entre los presentes, estuvieron las autoridades gubernamentales y los representantes de la CONAIE, FEINE y FENOCIN.54 El Ejecutivo aceptó a reducir el precio del combustible, a trabajar para focalizar su subsidio, a derogar el decreto ejecutivos 95, relacionado con política petrolero, y a reformar el decreto 151 para prohibir la actividad minera en áreas protegidas. Por su parte, las organizaciones indígenas declararon el cese de las movilizaciones y el retorno a las comunidades; además, los acuerdos establecieron una mesa de diálogo que duraría 90 días.
Crisis de seguridad
Desde 2021, Ecuador ha sufrido una crisis de seguridad producto de conflictos entre organizaciones criminales con conexiones al narcotráfico. La ola de violencia ha generado un marcado despunte en el número de asesinatos en el país.55 En 2021, la tasa de homicidios intencionales alcanzó el 14,04 por cada 100 000 personas (la mayor desde 2011),56 en comparación con una tasa de 7,8 en 2020.57 Estas cifras han continuado aumentando en 2022. La zona del país más violenta es la que aglutina a los cantones de Guayaquil, Durán y Samborondón. La misma vio 53 asesinatos entre enero y febrero de 2021 y 162 en el mismo periodo de 2022.58
El foco de la violencia se ha desarrollado dentro de los centros carcelarios del país,59 con hechos como la Masacre de la Penitenciaría de Guayaquil del 28 de septiembre, ocurrida en 2021 y considerada la quinta masacre carcelaria más sangrienta en la historia de América Latina.60 En total, 503 reos fueron asesinados en el país solo durante 2021.61 Sin embargo, la ola de violencia también se ha manifestado fuera de las cárceles. Esto se ha visto reflejado en la percepción ciudadana, como mostró una encuesta realizada por la firma Click Research en octubre de 2021 que señaló que la delincuencia era considerada por la ciudadanía como el mayor problema que atravesaba el país.62
Caso Encuentro

El 9 de enero de 2023, el medio digital La Posta, publicó una investigación que mostraba una trama de corrupción en empresas públicas, liderada por Danilo Carrera Drouet, cuñado del presidente Lasso. Su operador de confianza sería Rubén Chérrez, quien en 2021 creó siete empresas en un solo día y sería procesado por narcotráfico. El escándalo fue nombrado como «Caso El Gran Padrino».63 El gobierno guardó silencio durante dos días, hasta que Guillermo Lasso, en una entrevista concedida el 11 de enero, desvirtuó la denuncia y defendió a Carrera.64 Posteriormente cuatro de los principales implicados en el caso huyeron del país; incluso, uno de ellos, habría alquilado un camión blindado, presuntamente para llevar dinero en efectivo y algunos bienes.65 El 20 de enero, tras once días de la publicación de La Posta, la Fiscalía ejecutó ocho allanamientos simultáneos en Guayaquil y uno en Quito en el marco de las investigaciones del caso, rebautizando al mismo como «Caso Encuentro».66
Juicio político
El juicio político de Guillermo Lasso es un procedimiento legislativo llevado a cabo por la Asamblea Nacional del Ecuador de conformidad a los parámetros establecidos por la Constitución de la República, debido a las acusaciones de corrupción en empresas públicas dentro del caso Encuentro. Luego de las investigaciones realizadas por una comisión legislativa ocasional conformada en su mayoría por opositores al gobierno, se presentó un informe no vinculante que dio paso a que el Pleno de la Asamblea apruebe iniciar el trámite de enjuiciamiento político contra el primer mandatario el 4 de marzo de 2023.
El trámite del juicio político inició el 16 de marzo, siendo su admisibilidad aprobada por dictamen de la Corte Constitucional, el 29 de marzo.67 Posteriormente, el trámite del juicio pasó a manos de la Comisión de Fiscalización de la Asamblea Nacional, donde se presentaron las respectivas pruebas, además de varias comparecencias de funcionarios y exfuncionarios del gobierno de Lasso. Dicha comisión debía presentar un informe al respecto, pero el presidente de la comisión, Fernando Villavicencio, presentó por su cuenta un «informe borrador», que finalmente fue rechazado al ser sometido a votación por la Comisión de Fiscalización.68 Tras aquello, el Pleno de la Asamblea Nacional dio paso al proceso de juicio político en una votación realizada el 9 de mayo.20
El juicio político, como tal, inició el 16 de mayo, con la interpelación de los asambleístas Viviana Veloz y Esteban Torres. Posteriormente, el presidente Lasso compareció ante el Pleno Legislativo, sin embargo, no ejerció su derecho a la réplica, cosa que sí hicieron sus interpelantes. Tras estas intervenciones, el Presidente de la Asamblea, Virgilio Saquicela, abrió el debate.No obstante, al día siguiente Lasso disolvió el parlamento, por lo que el juicio quedó inconcluso.
«Muerte cruzada»
El 17 de mayo de 2023, Lasso disolvió el parlamento a través del Decreto Ejecutivo 741, en el que activó el artículo 148 de la Constitución Nacional, denominado «muerte cruzada», argumentando en su decreto «grave crisis política y conmoción interna». Dicho decreto obliga al Consejo Nacional Electoral convocar a elecciones presidenciales y legislativas extraordinarias, para completar el periodo de Lasso, en un lapso de siete días.
Aquella medida, junto con la militarización del Palacio Legislativo, fue considerada por gran parte de la opinión pública y el sector político ecuatoriano como una maniobra política para truncar el juicio que se llevaba a cabo en el parlamento contra el presidente Lasso. Además, fue calificada de «ilegal» por dichos actores políticos; por lo que se presentaron seis demandas de inconstitucionalidad contra el decreto presidencial.
Sin embargo, la Corte Constitucional inadmitió las demandas y ratificó la «muerte cruzada» decretada por el primer mandatario-
Adiós Lasso, 900 días marcados por la inseguridad y el desencanto
(prensa Latina) Cuando el 24 de mayo de 2021 el banquero Guillermo Lasso asumió la presidencia de Ecuador muchos pensaron que el país mejoraría en lo económico y lo social, sin embargo, 900 días después el desencanto es evidente.
Por Adriana Robreño
Corresponsal jefa en Ecuador
La más reciente encuesta de Perfiles de Opinión, publicada este noviembre, señala que el gobernante -que aseguró resolver los problemas del país en 100 minutos- se despide con apenas un 12,29 por ciento de aprobación.
Lasso deja la nación en medio de la mayor ola de inseguridad de su historia, quebrada en el ámbito fiscal, y con una sensación de que no hizo nada durante su administración, interrumpida por él mismo con su decreto de muerte cruzada en mayo pasado.
Entre ofrecimientos, contradicciones y mentiras, el jefe de Estado saliente acumula una lista de desaciertos que caracterizan al peor gobierno de la historia, afirmó el periodista Leonardo Parrini.
Las promesas incumplidas y los problemas del Ecuador de hoy superarían las 300 páginas de su libro o los 19 minutos del documental presentado a pocos días de su salida del cargo para exponer su legado y contrastar así la opinión de un gobierno fracasado.
DE LA VACUNACIÓN EXITOSA AL RECHAZO POPULAR
En el momento en que el jefe de Estado llegó al Palacio de Carondelet la pandemia de Covid-19 hacía estragos en el país y la vacunación era una prioridad para los ecuatorianos, imprescindible por cuestiones sanitarias y para reactivar la economía.
En ese contexto, el Ejecutivo impulsó un plan de inmunización que logró vacunar a nueve millones de personas en los primeros 100 días, un hito considerado la obra más importante del Gobierno de Lasso.
No obstante, como indica Parrini, la vacunación, “medida obvia de la que tanto se ufanaron sus publicistas”, no fue suficiente.
Poco después de la aplicación de las dosis, la popularidad del mandatario comenzó a caer en picada ante la falta de otras acciones.
La ceguera de Lasso le impidió ver la realidad y al parecer tampoco sabe de cifras oficiales: se perdieron 75 mil empleos en un mes (octubre 2023), la economía no crece más de 1,5 por ciento, sin dinero ni para sueldos de los burócratas y con un déficit fiscal de cinco mil millones de dólares.
A pesar de que su nombre apareció en la conocida investigación internacional Pandora Papers, supo bandearse internamente, pero luego, en 2022, la Asamblea Nacional hizo su primer intento por destituirlo por la gestión de las protestas del movimiento indígena, las cuales paralizaron el país durante casi tres semanas en reclamo de un freno a las políticas neoliberales.
Pese a las muertes en esas manifestaciones debido a la represión y a la conmoción social, el entonces gobernante consiguió salvarse de esa moción de censura y estableció un proceso de diálogo con el movimiento indígena, muchos de cuyos acuerdos están pendientes de cumplimiento.
DERROTA EN SU REFERENDO, JUICIO POLÍTICO Y MUERTE CRUZADA
En febrero de 2023, Lasso convocó a un referendo popular en busca de cambiar algunos artículos de la Constitución, pues en el legislativo tenía pocas probabilidades de avanzar en sus intenciones. Sin embargo, la ciudadanía en las urnas respondió No a las ocho preguntas propuestas por el Ejecutivo sobre temas relacionados con seguridad, medio ambiente y participación popular.
A partir de ese momento, debilitado por el resultado electoral y golpeado por las denuncias de supuesta corrupción en empresas públicas, el mandatario se vio golpeado por acusaciones de presuntos nexos con el narcotráfico en una trama a través de su cuñado Danilo Carrera y un amigo, Ruben Cherres, quien fue asesinado poco después.
Con esos argumentos, la oposición comenzó un proceso de juicio político en el legislativo para destituir a Lasso, aunque tras la revisión del caso por la Corte Constitucional, sólo pudo ser acusado por presunto peculado (malversación) en contratos de la empresa pública Flota Petrolera Ecuatoriana.
Cuando la Asamblea estaba a punto de votar la posible destitución del gobernante, él invocó la «muerte cruzada», mecanismo previsto en la Constitución, pero nunca antes aplicado.
De esa forma disolvió el parlamento, adelantó su salida del cargo y anticipó elecciones generales, sufragios realizados en dos vueltas, el 20 de agosto y el 15 de octubre, que conllevaron a la victoria del candidato de derecha Daniel Noboa, de la alianza Acción Democrática Nacional (ADN).
INSEGURIDAD, CIFRAS DE TERROR
La inseguridad marcó los casi 30 meses que Guillermo Lasso estuvo en el poder y pese a la veintena de estados de excepción decretados no pudo frenar la violencia ni el auge del crimen organizado.
La administración de su predecesor, Lenín Moreno, dejó el país ya con 14 muertes por cada 100 mil habitantes y una primera masacre carcelaria con 79 víctimas, pero en lugar de mejorar ese escenario, la situación se recrudeció y Ecuador podría cerrar el presente año con más de siete mil homicidios.
Esa cifra rompería el triste récord de 2022, cuando hubo cuatro mil 603 muertes violentas, que ya era la peor cifra de la historia.
A su vez, la crisis carcelaria quedó en evidencia en 14 matanzas en cinco cárceles del país, con un saldo de 387 presos asesinados.
Según la tesis gubernamental, esa situación se debe a la cada vez mayor incautación de drogas y los golpes contra el narcotráfico aunque expertos consideran que la pobreza, así como la falta de empleo y oportunidades, fomentan la vinculación de los jóvenes a los grupos delincuenciales.
En su plan de trabajo, el presidente Lasso prometía proteger la vida y el bienestar de los ciudadanos, pero actualmente Ecuador es uno de los 10 países con mayor criminalidad y las ciudades costeras de Durán y Guayaquil entraron en la lista de las más violentas del mundo.
En ese contexto se inserta la violencia política, con 88 casos de ataques entre 2022 y 2023, como el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio, según un reciente informe del Observatorio Ciudadano de Violencia Política.
El documento señala que entre los hechos reportados figuran asesinatos (34 por ciento), como el de Villavicencio y el del alcalde de Manta Agustín Intriago; atentados (48 por ciento); amenazas (10 por ciento); secuestros (cinco por ciento); y asaltos (tres por ciento).
ECONOMÍA Y ÉXODO MIGRATORIO En el ámbito económico tampoco se puede hablar de buenos resultados, ya que en cuanto al empleo, por ejemplo, más de la mitad de los trabajadores se encuentran en la informalidad, es decir, sin ganar el salario básico ni las garantías establecidas en la ley.
Líderes de municipios y parroquias rurales del país andino han demandado a Lasso las asignaciones pendientes para las administraciones locales.
Los prefectos de las 24 provincias expresaron su preocupación por la falta de recursos económicos, lo cual conlleva a la paralización de obras públicas y limita la preparación para el fenómeno climático El Niño.
Los gobiernos autónomos provinciales afirman que la administración central les debe 563 millones de dólares.
Por otro lado está el riesgo de caer en default o impago de obligaciones contraídas con organismos internacionales, como el Fondo Monetario Internacional (FMI), porque el déficit fiscal está al alza, los atrasos en el sector público se acumulan y el dinero escasea frente a múltiples necesidades.
El FMI proyectó un déficit fiscal de cinco mil millones de dólares, que representa cerca del cuatro por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), al cierre de este año.
En octubre, ese organismo recortó la proyección de crecimiento del país sudamericano para 2023 a 1,4 por ciento, en vez del 2,9 por ciento vaticinado a principios de año, mientras que la perspectiva para 2024 también disminuyó a 1,8 por ciento.
A eso se suma que el mandatario saliente deja a su sucesor una crisis energética, con un déficit de generación eléctrica que provocó desde finales de octubre apagones después de 14 años sin ese tipo de racionamientos.
Entre las promesas pendientes quedaron la meta de duplicar la producción petrolera, que actualmente está en cifras menores a la heredada, y sus intenciones de formar parte de la Alianza del Pacífico.
También ofreció firmar al menos 10 acuerdos comerciales y hasta la fecha se concretaron solamente los convenios con Costa Rica, China y Corea del Sur, y recientemente se rubricó un memorando de entendimiento con República Dominicana para iniciar negociaciones.
Lo que sí se puede decir que cumplió el mandatario fue el aumento del salario mínimo, el cual pasó de 400 dólares al inicio del mandato a 450 actualmente, un incremento de 25 dólares por año, aunque su idea era llegar a los 500 dólares en el período completo.
Asimismo, Lasso se enorgullece -incluso lloró al hablar del tema- de la disminución de la desnutrición de menores, que cayó 3,5 por ciento este año, en comparación con 2018, según datos publicados en la Encuesta Nacional de Desnutrición Infantil (ENDI).
En general, las crisis económica y de inseguridad provocaron una nueva ola migratoria entre los ecuatorianos, que prefieren dejarlo todo y arriesgar sus vidas en peligrosas rutas hacia Estados Unidos.
Según la Subsecretaría de Migración, cuatro mil 433 ecuatorianos fueron deportados desde ese país norteño y también desde México en 2022, y más de 14 mil en 2023, mientras analistas hablan de más de 200 mil ecuatorianos emigrados en los últimos dos años.
En esas circunstancias, Lasso deja el poder este 23 de noviembre y para los ecuatorianos comienza un periodo lleno de expectativas con Daniel Noboa al frente del Ejecutivo, un joven también de tendencia conservadora, heredero de una de las familias más ricas del país, quien en un año y medio deberá demostrar si es capaz de sacar adelante a la nación.
Para el historiador Juan Paz y Miño, «Noboa no alterará el modelo económico heredado» y quizás sólo «suavice comportamientos políticos», como el enfrentamiento y la persecución a los opositores, principalmente de la izquierdista Revolución Ciudadana.