GRANDE INDEPENDIENTE DEL VALLE CAMPEÓN DE LA SUDAMERICANA
Copa Sudamericana:
Independiente del Valle terminó con la ilusión de Colón y gritó campeón
(Clarín, Buenos Aires)
Fue 3-1 en Asunción, donde la final estuvo suspendida durante una hora por un diluvio. Hubo más de de 30 mil hinchas del equipo argentino en la Nueva Olla.

Dolor. El de los hinchas de Colón en la Nueva Olla. (Foto: REUTERS/Mariana Greif)
Los más de 30 mil hinchas de Colón se van de la Nueva Olla, se suben a los micros, a los autos, caminan con la mirada hacia el horizonte pensando en lo que pudo haber sido. Lo peleó hasta el final el equipo argentino, por todos lados y con su gente como bandera. Pero no le alcanzó para lograr el primer título en sus 114 años de historia. El que festeja es Independiente de Valle que ganó 3-1 una final muy pareja y accidentada en Asunción y borda la primera estrella de su escudo.
Colón
fue empuje sin ideas en el primer tiempo. Y lo pagó carísimo. Porque
Independiente del Valle, que no brilló pero fue prolijo, contó con una
eficacia total: las dos veces que fue a fondo contra el arco del
uruguayo Burian terminó festejando y gana 2-0 bajo la lluvia de
Asunción.
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Si al partido le hacía falta épica, si al marco que armó Colón le quedaba algo más por decorar, minutos antes de que comenzara la final de la Copa Sudamericana ante Independiente del Valle comenzó un fuerte temporal aquí en Asunción. El calor sofocante del día detonó en agua y viento.
a acción comenzó en tiempo y forma, pero a los 29 minutos ya con el equipo ecuatoriano en ventaja, al juez brasileño Rafael Claus no le quedó otra alternativa que detener la acción y esperar 30 minutos para ver si se podía seguir.
Hasta ahí, había sido el equipo del español Miguel Rodríguez el que imponía su juego, con muchos volantes con llegada, con tenencia de la pelota y buen manejo para salir desde el fondo.

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Colón decidió esperar. Ya lo había anticipado Lavallén. Y buscó ser un reflejo de su gente, se dejó empujar cada vez que los más de 30 mil sabaleros se levantaban y hacían tronar la Nueva Olla.
El gol de Luis Fernando León, que entró solito en el corazón del área tras un centro que se fue cerrando desde la izquierda fue un mazazo para el equipo argentino, que, para colmo, cuando intentaba reaccionar encima lo frenó la lluvia.